lunes, 17 de noviembre de 2014

Hablando de medicina estética...

Hoy os quiero hablar sobre un tema de actualidad y de interés para mujeres, y también para hombres, pues hay que reconocer que la imagen es algo muy valorado en nuestros días y en nuestra sociedad actual.

Personalmente se podrá estar de acuerdo o no con el uso de la medicina estética, por supuesto yo estoy en contra del abuso, pero debido a mi contacto con personas que se dedican profesionalmente a este campo, me he interesado e informado sobre algunos tratamientos, y aquí voy a contaros de la forma más sencilla posible en qué consisten algunos de los tratamientos de medicina estética más demandados actualmente.



Tratamientos faciales:

Los tratamientos faciales más demandados en medicina estética están dirigidos hacia la eliminación de las arrugas y de la flacidez del rostro. Para conseguirlo hay diversas técnicas, que van desde las inyecciones de vitaminas (el tratamiento inicial y más preventivo), hasta las inyecciones de bótox o la inserción de hilos tensores intradérmicos (el tratamiento más correctivo), pasando por infiltraciones de ácido hialurónico. Estas últimas, además de dar un aspecto más terso, también consiguen un efecto "relleno" si se utilizan en los pómulos por ejemplo. 

Hoy en día algunos productos para infiltraciones faciales también combinan diferentes principios activos, como las vitaminas y el ácido hialurónico, con lo que se consiguen mejores resultados en una sola aplicación.

Por lo que respecta a los hilos tensores intradérmicos, parece que podrán llegar a convertirse en sustitutos de los lifting quirúrgicos, pues se consiguen resultados espectaculares y duraderos después de su colocación en la propia consulta médica. He visto fotografías de pacientes de edad avanzada con arrugas importantes en la zona del cuello, con resultados impresionantes después de su aplicación. Los hilos tensores son inocuos, debido a que están fabricados con sustancias orgánicas reabsorbibles, aunque por ese mismo motivo, sus efectos no son permanentes, y hay que ir repitiendo su aplicación cada cierto tiempo.


Hilos tensores intradérmicos de Polidioxanona


Tratamientos corporales:
 
La estrella de los tratamientos corporales son los tratamientos dirigidos a la eliminación de grasa localizada (abdomen, piernas, cartucheras, etc.). Existen muchos tratamientos para eliminar grasa localizada, pero hoy me centraré en los tratamientos médicos ambulatorios, que no requieren intervenciones quirúrgicas. 



Uno de los tratamientos punteros para eliminar grasa localizada sin cirugía es la intralipoterapia, que consiste en infiltraciones con un producto denominado Aqualyx (producto que produce una lipólisis de las grasas). Normalmente son necesarias unas 3 sesiones para conseguir resultados correctos, y se pueden tener algunas molestias en la zona durante unos días. Los resultados del tratamiento con Aqualyx son bastante definitivos, pues este producto, a diferencia de otras técnicas, destruye los adipocitos, con lo que la grasa no se vuelve a instalar en la zona.
 

Póster informativo sobre Aqualyx de la Dra. Rosa Serra


En cuanto a la celulitis, los tratamientos médicos más efectivos son la carboxiterapia, inyectando CO2 en la zona afectada, combinada con tratamientos de mesoterapia. En cuanto a las últimas novedades en tratamientos anticelulíticos, uno de los más novedosos son las infiltraciones con Alidya ("Anti Lipodystropic agents"), producto inyectable que regenera el tejido adiposo, lo que permite que la piel recupere su aspecto normal. Alidya es un producto inyectable por técnicas de mesoterapia, por lo que no resulta prácticamente doloroso. Se recomienda una media de 7 a 12 sesiones para obtener resultados óptimos.


Folleto informativo del tratamiento anticelulítico Alidya


Tratamientos láser:
 
El láser tiene muchas aplicaciones en medicina estética, la más conocida la depilación permanente, pero también da muy buenos resultados en la eliminación de manchas, varices y tatuajes. Hay diferentes tipos de láser, y es muy importante su correcta aplicación para evitar problemas y quemaduras, por lo que os recomiendo que sea aplicado por un profesional médico, así como una buena información previa y acudir a centros o especialistas de confianza.


En cuanto a profesionales que se dedican al campo de la medicina estética, os doy la referencia de una doctora que trabaja en Barcelona, la Dra. Rosa Serra Rueda: es especialista en medicina estética y ejerce su profesión desde hace años en diversos centros de Barcelona (clínica Dexeus, clínica del Dr. Tufet) y tiene consulta propia en Mataró ( C/ Montserrat, 60, Tel: 93 7419141).
La Dra. Serra es amiga mía, y la única profesional con la que tengo experiencia propia en tratamientos estéticos, por suerte pocos hasta ahora, pero tengo que deciros que he quedado satisfecha al 100% en todos los tratamientos que he recibido en su consulta: Depilación láser, eliminación de manchas faciales con láser y tratamientos corporales anticelulíticos.

Además también utilizo productos farmacéuticos para el cuidado de la piel que me ha recomendado la Dra. Serra, como os comenté en el artículo de hace unas semanas: ¿Secretos de belleza?

Tratamiento facial con proteoglicanos de MartiDerm, del que os hablé en el artículo ¿Secretos de belleza?


Hasta aquí os he dado unas primeras pinceladas sobre tratamientos en medicina estética, aunque es un tema muy amplio, y espero volver a tratarlo para presentaros novedades en un futuro.

Para acabar, sólo me queda deciros que para mí lo más importante es sentirse a gusto con nuestro cuerpo y nuestra vida en general, con o sin arrugas, con o sin cartucheras. La medicina estética está para que la use quien quiera y quien considere que la necesite, pero siempre sin presiones.

Espero que la información de este artículo os sea útil. Y acabo recordando el lema de la coach Ana Alexandre: "love your body", "ama tu cuerpo"... ¡creo que es algo que no debemos olvidar nunca!


Nos encontramos pronto en este Rincón con nuevos artículos ;-)

domingo, 9 de noviembre de 2014

¿La alimentación como medicina?

Como ya he comentado en algún otro artículo, la nutrición es un tema que siempre me ha interesado, en gran parte porque me encanta comer, y también porque desde hace años tengo que cuidar mi alimentación por algunos problemillas de salud que tuve... Eso sí, aunque me cuido, creo que comer es un placer y que ¡hay caprichos culinarios que nadie debería perderse!

Algunos de mis caprichos favoritos: chocolate y un buen café expreso con leche, y algunos alimentos que me encantan, como el queso, o platos caseros como la fideuà o la paella valenciana!


Volviendo al tema de este post, debido a mi interés por la nutrición, y movida por la curiosidad y ganas de conocer mejor el tema, este verano me decidí a hacer un seminario de la Universidad, en concreto de la UOC, sobre nutrición, con un título interesante: "Nutrición, salud y bienestar: la alimentación como medicina".

El seminario trata de aclarar a los alumnos los conceptos básicos de alimentación y nutrición (tipos de alimentos, dieta equilibrada, etc.), y además dar a conocer los cambios que ha sufrido la alimentación y nutrición en los últimos años, con la aparición en el mercado de nuevos productos con supuestas propiedades para mejorar nuestra salud. Durante el seminario me he adentrado en el mundo de los alimentos funcionales: probióticos, prebióticos, omega 3, etc. También he debatido con mis compañeros los pros y los contras de estos alimentos y nuestra opinión sobre este tema.


Alimentos funcionales: el pescado azul y los frutos secos contienen ácidos grasos Omega 3, algunos productos lácteos contienen probióticos.
 
 
A continuación os cuento algunas ideas que he sacado del seminario y que me parece interesante dar a conocer:
 
¿Qué son los alimentos funcionales?
 
Los alimentos funcionales son aquellos que contienen componentes biológicamente activos, ofrecen beneficios para la salud y reducen el riesgo de sufrir enfermedades. Tienen aplicaciones diversas, como regular la actividad intestinal, reducir los niveles de colesterol, reducir el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares, aumentar las defensas, etc. Sin embargo, conviene remarcar que los alimentos funcionales no curan.

Como curiosidad, los alimentos funcionales tienen su origen en Japón, en los años 80, y surgieron con el fin de reducir los gastos sanitarios de una población con un envejecimiento récord, y mejorar la calidad de vida de esta población. El Gobierno de Japón fomentó entonces el desarrollo de productos alimentarios que aportaran beneficios para la salud. Después, esta idea empezó a extenderse a otros países, como Estados Unidos, donde la mayoría de alimentos funcionales van destinados a mejorar el excesivo consumo de grasas saturadas.
 
 
¿Para qué sirven estos alimentos?
 
El objeto de los alimentos funcionales es mejorar ciertos aspectos del estado de salud de las personas que los toman, o bien prevenir determinadas patologías. Por lo tanto, su uso puede estar aconsejado en ciertos casos, pero para la población en general lo principal es seguir una dieta equilibrada, que incluya los diferentes tipos de nutrientes (hidratos de carbono, proteínas, lípidos, vitaminas, minerales y agua) en las proporciones adecuadas.
 
 
¿Cuáles son los alimentos funcionales?
 
Los principales alimentos funcionales son los siguientes:
 
- Los probióticos: Son microorganismos vivos activos, que, al ser administrados en las cantidades adecuadas, resultan beneficiosos para la salud. Se encuentran en determinados productos lácteos y los más conocidos son los lactobacillus y los bifidubacterium. Los alimentos que los contienen se llaman alimentos probióticos, o probióticos simplemente.
- Los prebióticos: Son fibras solubles que estimulan la actividad de las bacterias beneficiosas para la flora intestinal. Algunos ejemplos son los fructooligosacáridos, como la oligofructosa y la inulina.
- Los fitoesteroles: Son esteroles de origen vegetal que disminuyen la absorción intestinal del colesterol. Se encuentran en la soja, almendras, nueces, etc. También hay productos alimenticios preparados que contienen fitoesteroles, el más conocido el "Danacol".
- Los ácidos grasos Omega 3: Son ácidos grasos poliinsaturados que protegen el sistema cardiovascular. Se encuentran en el pescado azul, por ejemplo.
- Los antioxidantes: Son compuestos que protegen al organismo frente a la oxidación (proceso de degeneración biológica que da lugar a la aparición de los radicales libres). Los principales son la vitamina E, la vitamina C, los beta-carotenos, el cinc y el selenio.
- Los productos enriquecidos o modificados: son productos alimenticios a los que se les añade algún componente antes de su comercialización, para que tengan efectos beneficiosos sobre la salud. El ejemplo más conocido son la leche y sus derivados enriquecidos en calcio y vitaminas.
 
 
¿Son necesarios estos alimentos?
 
Hay que recordar que los alimentos funcionales no son curativos, pero en general, si una persona tiene una patología leve, puede ser recomendable recurrir a alimentos funcionales antes que a fármacos, siempre siguiendo el consejo de un profesional de la salud. Por ejemplo, los probióticos y prebióticos son muy efectivos en casos de estreñimiento, los fitoesteroles ayudan a mantener los niveles de colesterol, y los antioxidantes están aconsejados en personas con necesidades específicas de vitaminas, como personas de la tercera edad, por ejemplo.
 
Como reflexión final, los alimentos funcionales tienen defensores a ultranza y grandes detractores, pero como siempre, creo que lo más aconsejable es tratar de ser objetivos, y a la vez prudentes en un tema tan importante como la alimentación. En mi opinión, no creo que sea prudente atiborrarse de alimentos funcionales y en cambio no seguir una alimentación equilibrada, pero ciertos alimentos funcionales pueden ayudar a complementar nuestra nutrición si poseemos necesidades específicas o tenemos un problema de salud concreto.
 
Y, como no, lo más recomendable es dejarse aconsejar por los profesionales: médicos, farmacéuticos y nutricionistas, que son los mejor preparados para ayudarnos en este tema y en otros relacionados con nuestra salud.


Para acabar os dejo la conclusión para mí más importante de este seminario sobre nutrición:

"Una alimentación equilibrada, que contenga los distintos tipos de nutrientes en proporciones adecuadas, es fundamental para prevenir problemas de salud"








domingo, 2 de noviembre de 2014

Una casita sorprendente...

Como siempre os digo, me gusta comer bien, pero sobre todo disfruto comiendo bien en restaurantes a precios razonables, como os contaba hace meses en mi artículo sobre las ofertas de la web "El Tenedor":

Cómo comer en buenos restaurantes a buen precio

Hoy os quiero contar mi última experiencia gastronómica en un restaurante, esta vez en Castellón, hace tan sólo unos días, cuando fuimos a comer para celebrar el cumpleaños de mi hermana.

El restaurante se llama "La casita de Gredos", y está muy cerca de la casa de mis padres en Castellón, en la calle Gracia, 26, una calle poco transitada, pero muy céntrica, justo al lado de la calle Mayor.

 Imágenes de la Casita de Gredos, en Castellón de la Plana
 
 
Era la primera vez que íba a comer allí, y lo primero que me sorprendió gratamente fue la bonita decoración del local, una casa de las típicas de esa zona de Castellón, pequeña, pero muy cuca, decorada en un estilo romántico, en tonos claros, con flores, preciosas lámparas y detalles en todos los rincones, desde la zona de la entrada hasta la propia escalera de bajada a la cocina (debido a las dimensiones del local, la cocina está en el sótano de la casa):

Detalles de la decoración de la Casita de Gredos

La atención del personal muy correcta y amable desde un principio, y nos ofrecieron la carta, un menú degustación, y un menú del día, que tienen de lunes a sábado a mediodía.

Nos gustaron los platos del menú y decidimos no complicarnos mucho y pedir todos el menú del día: De primero tres entrantes para cada persona, y luego un segundo a escoger, entre tres opciones.

Los primeros eran unos bombones de brandada de bacalao, unas tostadas con escalivada, anchoa y panceta, y unas habitas con calamarcitos y ajos tiernos. Todos ellos exquisitos:

Tostadas de escalivada y habitas con calamares
 

Los segundos a escoger, arroz meloso de gambas, secreto ibérico y rodaballo a la espalda. También muy buenos todos, pero a destacar el arroz, que no pedí, pero probé, y estaba delicioso, tanto el propio arroz, como las gambas que llevaba. Todos los platos perfectos de sabor y con el punto correcto de cocción y de sal:

Segundos platos del menú: Arroz meloso, rodaballo y secreto ibérico
 

En cuanto a los postres, se podía escoger entre un hojaldre relleno de nata con chocolate caliente, un brownie con helado, y una ensalada de frutas, también todos deliciosos:

Ensalada de frutas (los otros postres volaron antes de poder hacerles una foto...)


Y todo este menú, con bebidas incluidas, y unas pastitas para acompañar los cafés, por 20 euros. Por supuesto, además de la buena comida, la relación calidad-precio de este restaurante, lo hace totalmente recomendable bajo mi punto de vista.

No tengo más que deciros que espero repetir pronto y volver a comer en "La casita de Gredos" en mi próxima visita a Castellón. Espero probar alguno de sus platos de bacalao, ya que parece que son especialistas en este producto, o alguno de sus platos de carne. Así que espero poder contaros mi experiencia con estos nuevos platos.



Hasta muy pronto, y ¡espero que os haya resultado apetitoso este artículo!